Celebración inaugural


Silvia Martín

Hace un mes tuvo lugar la celebración de la creación del proyecto El proceso, Mindfulness para ti, que hoy sale a la luz.

En una casa tradicional canaria con amplios jardines, nos reunimos miembros del equipo, colaboradores, familia y amigos para disfrutar de un día singular en el que el juego, la música y la cooperación fueron protagonistas.

El proceso ofrece experiencias mindfulness y en la celebración inaugural, algunas de ellas las pusimos en práctica a través de una versión especial del juego “La búsqueda del tesoro”.

Los piratas de cada equipo se enfrentaron a cinco pruebas en las que debían conseguir las pistas, en forma de puntos, que les permitieran obtener el tesoro. Pruebas a realizar en un tiempo limitado, en las que debían mantener su atención en la acción que tenían encomendada como tratar de seguir la coreografía de un baile, sentarse en círculo para mantener, en silencio, la mirada con el compañero que estaba en frente o representar una escena sin palabras.

                              

En este proyecto, como pudo comprobarse ese día, apostamos por aportar un carácter creativo y lúdico a algunos de los ejercicios de entrenamiento de la atención que proponemos. De ahí que además contemos con colaboradores de disciplinas como las artes plásticas, la música, la danza o el teatro, para que nos asesoren e intervengan de manera activa en la realización y ejecución de algunos cursos o talleres.

Antes de que se pusiera el sol, la música y el baile cobraron un sentido especial en la celebración gracias al grupo Kuarembó, una banda de música mestiza  que, como nosotros, entiende el arte como vital elemento de transformación, celebración y (R)evolución y cuyas letras están tan cargadas de consciencia como de alegría y esperanza.

                   

La cooperación de todos los que fueron invitados a participar se manifestó de manera visible durante de la celebración, disfrutando como niños en los juegos, manteniendo charlas en las que se permitieron conocer y dándose a conocer a personas desconocidas, cantando algunos y, muchos, bailando.

Pero esta cooperación comenzó los meses previos con los preparativos, en los que aportaron información necesaria para la organización, enriquecieron las actividades con sus ideas y sugerencias, propusieron deliciosos platos que después cocinaron y dieron soporte logístico.

Una celebración que fue un éxito gracias al entusiasmo, la implicación y el trabajo de todos los que, con un objetivo común, formamos ese día un gran equipo y que no puede menos que augurar el éxito de este proyecto que hoy, desde aquí, mostramos y al que invitamos a participar a quien lo desee.