Julio Chinea
Círculos de hombres - Terapia de polaridad - Acompañamiento personalizado para hombres
Desde muy joven me interesé por el crecimiento personal y espiritual. Con 18 años decidí cambiar mi alimentación y comencé una relación de pareja estable. Siendo también muy joven me casé, tuve hijos, me separé y volví a tener parejas.
En todo ese camino fui aprendiendo muchas herramientas terapéuticas y de crecimiento: la Terapia de Polaridad, los aceites vibracionales Eterion Oil, el Reiki, el Diksha, el Magnified Healing, la Escuela de Ramtha, el Chamanismo, el Subud, Un Curso de Milagros, entre otras. Estaba buscando.
Hace poco, después de muchos años y experiencias, conecté con los Círculos de Hombres, la Sexualidad Consciente y La Masculinidad, me formé en ello y ahora mismo son las herramientas que direccionan mi intención, que es ayudar a las personas a reconocer los obstáculos en el camino de regreso a la paz.
¿Cómo llegué al trabajo con hombres?
Hace relativamente poco tuve una relación de pareja, no tan larga pero intensa, y una separación que me llevó a tocar fondo de cierta manera. Tanto durante la relación como después de ella se me hicieron patentes varias cosas:
- Que a pesar de las herramientas acumuladas y el trabajo interno ya desarrollado -y por mucho que me costara reconocerlo- aún había muchas cosas de base que solucionar en mi.
- Me di cuenta de que se habían repetido en mis relaciones varios puntos de conflicto, tanto a nivel sexual como de actitud, y que además quedaba aún mucho por sanar con respecto a mis padres.
- Que buscar y aceptar ayuda externa se hacía imprescindible. Que el trabajo principal es individual y la responsabilidad es mía, pero que sin ayuda me encontraba perdido y muy solo.
¿Cuáles son las cosas que se me han repetido a lo largo de mi historia?
❖ Problemas sexuales: tenía por épocas episodios de eyaculación precoz, disfunción eréctil, miedo a que mi pareja me pidiera tener sexo. Eso en definitiva causaba mucha frustración sexual en ambos y me puso en contacto con la soledad masculina.
❖ Siempre había sido de perderme en la pareja. Me olvidaba muy rápido de mí y de mis necesidades, y cuando me quería dar cuenta, era difícil volver atrás sin que pareciera que me estaba alejando.
❖ Por eso desarrollaba mecanismos de huida, excusas que yo creía ciertas pero que venían de mi falta de capacidad para comunicarme con asertividad desde un principio, y también de que me faltaba de conocerme un poco más a mí mismo para poder tener claras mis necesidades.
❖ Solía tener episodios de falta de energía, claridad y propósito propio, consecuencia de ceder inconscientemente todo para agradar o retener a la otra persona.
¿Cuáles son las actitudes que estoy empezando a cultivar y en las que te puedo acompañar?
★ La primera, tomar la RESPONSABILIDAD de mi vida en todos los aspectos:
○ Sexual: Empiezo a conocer mi cuerpo y trabajo mi sexualidad para sentirme pleno y poder compartirme desde esa plenitud, sin buscar que otra persona me proporcione el placer y saliendo de las estructuras caducas de la relación sexual típica.
○ Mental: Conozco como pienso y me hago responsable de lo que estoy construyendo en mi vida a partir de esos pensamientos. Dejo de culpar a personas o situaciones por cómo estoy yo.
○ Actitud: Empiezo a gestionar mi tiempo y mi energía de manera más inteligente, y aprendo a tratar con compasión y sentido del humor mis momentos de debilidad. Voy desarrollando la comprensión de que soy un ser humano: no quiero ser perfecto ni impresionar a nadie, no quiero ser un super hombre ni un iluminado, simplemente quiero vivir mi vida con plenitud y libertad.
Poco a poco me voy dando cuenta de que, paradójicamente, desarrollar estos aspectos que tienen que ver con mi esencia masculina, pasa necesariamente por cultivar mi SENSIBILIDAD, que es mi esencia femenina. ¿Por qué? muy sencillo:
Porque hasta que no me abro a sentir mis emociones en profundidad y sin juicios, siguen estancadas en mi interior, y son las que me condicionan día a día a seguir comportándome según unos patrones específicos que no puedo controlar.
¿Para qué quiero acompañarte?
Quiero para todos mis compañeros de planeta -hombres- lo mismo que quiero para mi: que descubran cuál es su lugar en sus relaciones y en el mundo, que aprendan cómo relacionarse de otra manera con su cuerpo y con el cuerpo de sus compañeras o compañeros, y que sepan cómo dejar atrás la frustración de los problemas sexuales y la soledad masculina y cultivar un estado de plenitud tanto sexual como vital.
No te puedo decir que haya transitado todo el camino, aún me falta mucho por recorrer y por descubrir; sin embargo la combinación de mi experiencia y mis herramientas puede ser lo que necesitas para empezar a comprenderte, a conocerte, y a ConSentirte.