Rocío Luque

Mi camino de la mano de la práctica de Yoga comenzó hace 12 años cuando, al enterarme que había llegado a mi vida el desafío de una enfermedad autoinmune, se me hizo evidente que necesitaba poner atención a mi experiencia vital.

El yoga me sorprendió por el respeto absoluto que significó y significa para mi ser, ya que fue una de las prácticas físicas donde experimenté escucha, cuidado y atención plena. Además, mi corazón se sentía en el lugar que le correspondía al estar en la shala con las demás personas. Cuando el alma se siente a gusto, las dudas se disipan.

El tiempo fue pasando, me gradué de abogada, me mudé de mi país originario, fui cambiando como persona, y el yoga me acompañó constantemente. También una nueva compañera apareció con los años, la meditación, donde el viaje ha resultado mucho más hacia dentro de lo que podía haber imaginado.

Poco a poco, adentrándome más en la práctica y en la meditación, fui dándome cuenta de que mi vida era un precioso regalo, que cada día tenía la posibilidad para decidir sobre mi armonía y paz interior, y es así que decidí dedicarme a lo que más feliz me había hecho en la vida, el Yoga.

Creo que muchas veces las decisiones importantes que llevamos adelante en la vida están tomadas por nuestras mentes, escuchando esta voz a veces nos desconectamos de nuestra verdadera esencia.  Descubrí que en mi cuerpo hay una guía fiel y amorosa que me muestra lo que me hace vibrar y ser quien vine a ser, a través de la intuición y la sutileza.

El yoga es para mí, un mapa en este viaje, que siempre me trae a quien soy, me conecta y reconecta con mi ser. Me permite escuchar, de forma pausada e íntima. La práctica trae tanta humildad y sencillez que siempre me deja boca abierta.

Me formé como profesora de Hatha Yoga en Yoga Center en Madrid, porque quería compartir esta increíble experiencia. Quise compartir mis descubrimientos y una práctica que permite dar independencia, sabiendo que el mayor maestro vive dentro de ti.

La vida es nuestra, es para disfrutarla, conectarnos, apoyarnos y crecer juntos.